miércoles, 7 de septiembre de 2016

ALIMENTACIÓN INFANTIL (PARTE I)


Hoy quiero abordar un tema que cada día me gusta más, la alimentación de los “pequeñajos”.He decidido escribir sobre éste tema porque una amiga (Sonia) y seguidora de mi blog me ha pedido que escribiera algo al respecto puesto que sigue siendo un tema que preocupa y mucho a los padres. Os aconsejo que sigáis su blog "La sonrisa despeinada" en el que escribe y da muchísimas pistas e interesantes ideas para los nuevos padres, desde sus vivencias y experiencias personales.

Creo que ya es sabido por todo el mundo que la alimentación es la base necesaria para un buen desarrollo físico, psíquico y social de los niños. Por lo tanto una buena alimentación con su  consecuente correcta nutrición y una buena salud están directamente conectadas, pero la conexión es de vital importancia durante la primera infancia (0 a 8 años). Durante este período, los niños pueden adquirir buenos hábitos alimenticios en lo que se refiere a la variedad de los alimentos y al sabor de las comidas. En caso contrario, una mala alimentación conlleva no sólo no poder adquirir hábitos adecuados de alimentación, sino que puede tener efectos devastadores para el niño y su desarrollo.



INTERPRETACIÓN DE LOS GESTOS DE LOS MÁS PEQUEÑOS DURANTE LA COMIDA

Según expertos psicólogos percibir que los niños no dejan de jugar con la comida, haciendo bolas en la boca y pasándola de un lado a otro de la boca y también provocándose arcadas o incluso el vómito, indica en un gran porcentaje de los casos de una llamada de atención del niño a sus padres, quiere que le presten más atención. Generalmente los papis en éste momento es cuando más se agobian, entonces ellos (los peques) saben que si hacen esto van a conseguir dejar de comer.
Cuando algo se aprecia que es más exagerado de lo habitual y se escapa del control de los padres se debe de pedir ayuda a un profesional psicólogo infantil.




MÉTODO BLW (BABY-LED WEANING) O  ALIMENTACIÓN AUTORREGULADA POR EL BEBÉ

Quiero afirmar que éste método me tiene realmente entusiasmada, porque he podido comprobar que funciona genial y que los hijos de mis amigas comen mucho mejor siguiendo éste método que los niños que no lo siguen, de hecho comen más variado y de todo por su propia mano.


El método BLW, consiste en que se permite al bebé conocer nuevos sabores, olores y texturas, enseñando al bebé a elegir respetando sus decisiones y permitiendo al pequeño comer a su ritmo. Así, los padres simplemente suministran la comida al bebé, en porciones adecuadas a su edad, dejándole espacio para que decida qué quiere comer, cuanto y en qué orden.

BENEFICIOS DEL MÉTODO BLW
  • El bebé toma las decisiones sobre la comida, le enseñamos el placer de comer y evitamos que asocie ideas negativas con la comida.
  • Desarrolla los sentidos y la capacidad manual.
  • Se mejora la comunicación entre el bebé y los padres, puesto que se  relajan la sensación de control que tienen los padres.
  • Mejora la dieta de la familia: Si se permite al bebé comer del plato de los padres éstos tendrán que adaptar su dieta a comidas sanas y nutritivas, buenas tanto para el bebé como para ellos. Éste punto es muy importante, porque los niños observan lo que los padres hacen y ellos siempre tienden a imitarlos, por lo tanto si los padres comen sano transmiten una alimentación sana al niño, y al contrario sucedería igual.


INCONVENIENTES DEL MÉTODO BLW
  •   No apto para  padres maniáticos de la limpieza: El método BLW, al permitir que sea el bebé quien manipule la comida desde que es muy pequeño, lo que evidentemente supone que el peque manchará mucho con bastante probabilidad. Es mejor que este método se ponga en práctica en sitios de la casa fáciles de limpiar (mejor que se ensucien los azulejos que una pared pintada), con babero grande (mejor con mangas) y muchas servilletas a mano. Cuando el bebé está lleno jugará más con la comida, por lo que conviene retirársela. A CAMBIO LA EXPERIENCIA ES MUY DIVERTIDA. Desde mi punto de vista, tengo en mi en torno a 3 bebés, 2 gemelas (Vera y Luna) y otra peque Lucía, hijos de dos amigas, que comen con éste método desde el 6 mes, siguiendo el calendario de introducción pautado por los pediatras y la verdad que a mí me resulta muy divertido verlas comer y me encanta porque comen absolutamente de todo sin hacer ascos a nada, de hecho en la guardería sus profes comentan a los papis que son las niñas que mejor comen y hablo de diferentes guarderías y diferentes sitios, así que animo a los papis a intentarlo.
  •  Miedo al atragantamiento: Con este método se ofrecen a los bebés alimentos sin triturar, en trozos, dejando que los coma solo y aprenda a masticar aún sin dientes. Esto puede causar temor a que el bebé se atragante, aunque resulta muy improbable que esto suceda, sobre todo con la obligatoria supervisión de los padres. En caso de sufrir este temor se puede suavizar el método dejándolo todo en trocitos mínimos antes que sufrir innecesariamente, ya que el bebé capta muy fácilmente los sentimientos de los padres y no es conveniente que relacione algo negativo con la comida. No obstante y volviendo a los ejemplos que os he puesto anteriormente de Vera, Luna y Lucía, estas 3 preciosidades comen trocitos muy pequeñitos para evitar por completo el atragantamiento. Respecto a éste apartado, una de mis amigas decidió hacer la introducción de la comida con comida muy blandita, o en tiras finitas para que lo chupen y se fueran familiarizando con nuevos sabores y texturas.



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